Allá por 2020, la marca estadounidense Argonaut Cycles presentó la más reciente evolución del modelo de carretera, el RM3. Ahora, unos años después, además de seguir ofreciendo la opción full-custom de esta bicicleta, apuestan por Supernaut. Esta bicicleta se presenta como alternativa basada en tallas predefinidas (Proven Geometries™) que permite a sus clientes potenciales adquirirla en un tiempo mucho más inmediato sin renunciar a la máxima calidad y acabados marca de la casa.

Durante nuestra participación en el último GiRodeo, coincidimos un año más con el equipo de Argonaut en nuestro paso por Girona y compartimos algunos kilómetros de gravel juntos. Para la edición 2023 del evento, no venían tan solo con sus preciosas GR3 y las ganas de ponerlas a prueba alrededor de la ciudad catalana, sino que también traían con ellos algunas unidades de la flamante Supernaut.

Mantuvimos el contacto desde entonces, y hace apenas escasos días aprovechando una nueva visita a nuestros amigos de The Service Course, que son uno de los principales delaers de la marca en Europa, tuvimos la ocasión de probar esta verdadera obra de arte sobre ruedas. Como era de esperar, no nos dejó indiferentes.

Listos para rodar

Made in USA es parte del ADN de la marca y la Supernaut no podía ser de otra manera. El principal objetivo de esta versión de la RM3 es tener una guía de tallas predefinida basada en las geometrías que ellos consideran más adecuadas para cada bicicleta y así asegurar el mejor equilibrio entre rendimiento, rigidez, peso y confort.

Con esta fórmula los chicos de Bend (Oregon, EEUU) pretenden reducir la gran lista de espera que podrías encontrar en la opción full custom y darle al cliente la posibilidad de adquirir este modelo en un tiempo mucho más reducido. Estamos hablando de que la producción de una Supernaut está estimada en unas cuatro semanas. A esto, habría que sumarle el tiempo de montaje, ajustes y envío.

Trás la fabricación de cada Supernaut hay muchas horas de diseño, pensando y analizando la mejor forma de llevar a cabo cada elemento que forma esta bici para ofrecer la máxima calidad de conducción posible. Un claro ejemplo de ello es el High-Pressure Silicone Molding (HPSM), que les permite eliminar la distorsión de la fibra, los huecos, los poros y los defectos estructurales de la ecuación de disposición del carbono. Un proceso patentado por ellos y que es una prueba más del alto nivel de exigencial al que se someten ellos mismos para garantizar los mejores resultados.

“Argonaut se basa en la calidad de conducción. Nuestra razón de ser es hacer la mejor bicicleta del mundo. Desde el momento en el que te subes a una Argonaut deberías sentirla como parte de ti. Nosotros logramos esta elevada calidad de conducción gracias a las immejorables tareas de ingeniería, destreza, y control de calidad. Ah, y todo se fabrica al 100% en los EE.UU.” – Ben Farver

Para este 2024 la marca ha decidido fabricar un máximo de 100 unidades, cosa que aún la hace más atractiva.

Por último, pero no menos importante, nos gustaría aclarar que la versión Supernaut también existe para su modelo GR3 que ya os presentamos hace un tiempo.

Llegó el momento de la acción

Como ya hicimos en su momento la primera vez que tuvimos la oportunidad de probar una Argonaut en primera persona, The Service Course nos brindó la posibilidad de poder repetir la experiencia probando la Supernaut. Su equipo nos recibió con los brazos abiertos y nos ofreció acompañarnos durante todo el test de la bicicleta mientras disfrutábamos de una de las rutas clásicas por la costa.

La bicicleta desprende calidad por todos lados. La unidad que probamos correspondía a su opción más ligera con todo el layout de carbono a la vista y en la que puedes apreciar la artesanía del proceso de construcción y cómo han dado forma a todas y cada una de las partes que forman el cuadro.

Durante la ruta, el rodar se hizo fácil. Es una bici cómoda y que rueda realmente bien en los llanos. A ello también contribuye, en parte, las nuevas ruedas de carbono que la propia marca está fabricando in-house.

Mientras charlábamos con Mads, de la crew de The Service Course, llegamos a la parte más exigente de la ruta, una ascensión de unos 12 kilómetros en la que pudimos poner a prueba nuestra Supernaut. Se mostró ágil, rígida, y reactiva, sin llegar al punto de considerarla nerviosa en exceso. Hacemos énfasis en la rigidez porque, según una conversación que tuvimos con Ben Farver, fundador de la marca, hace ya un tiempo, nos contó que uno de sus principales objetivos era construir bicicletas de carbono pero buscando siempre el comportamiento más parecido a una bici de acero. Es por esta razón que cada cuadro tiene un layout específico en base al comportamiento y características de cada cliente.

Tras darnos algún apretón que otro, coronamos y nos lanzamos hacía abajo sin pensarlo un instante. Siempre que probamos una bici intentamos encontrar un equilibrio entre disfrutar de la conducción, identificar las cualidades y carencias, e intentar no irte al suelo por pasarte de la raya al buscar los límites de cada test. En esta ocasión, a pesar de que la altura de la potencia no era la que mejor se ajustaba a nosotros y que el manillar era algo más ancho de lo que estamos acostumbrados, la bici en todo momento respondió como tocaba. El manejo en las curvas en bajada fue positivo y, como ya hemos dicho antes, sin ser demasiado reactiva, algo que se agradece.

Parada obligada para café y seguimos disfrutando de la RM3 Supernaut unos kilómetros más hasta regresar a la ciudad de Girona.

Componentes y ruedas propias

A diferencia de previas ocasiones, esta vez la marca incluía en el montaje ruedas de perfil y tija de fabricación propia. Dos novedades en las que la marca llevaba trabajando un tiempo y que, parece ser, estarán pronto disponbiles.

Las ruedas, con 43mm de perfil, hookless, y con todo el carbono a la vista, tienen una pinta impresionante. Vienen montadas con bujes DT Swiss 180 y tienen un ridículo peso de 1.260 gramos. Son unas ruedas realmente rígidas y rápidas y, para esta unidad, venían montadas con neumáticos Vittoria Corsa Graphene 2.0.

En cuanto a la tija, realmente atractiva por su diseño y acabados, encaja perfectamente con el resto de la bicicleta y añade un plus si cabe al conjunto total.

Para el resto del montaje, los chicos de Argonaut escogieron un conjunto de potencia y manillar de Enve, un sillín Repente Artax GLM, y un infalible Shimano Dura-Ace R9250 para poner la guinda del pastel a esta bici de ensueño.

Conclusión

Hemos podido comprobar de primera mano que la marca ha hecho un gran trabajo. La identidad de Argonaut está reflejada perfectamente en todos y cada uno de los detalles que dan forma a la Supernaut. Si, además de lo anterior, contamos con la posibilidad de que cualquier persona interesada en adquirir una Argonaut, lo pueda hacer en un tiempo muy reducido, pues solo nos queda felicitar a Ben y todo su equipo por el resultado que han conseguido.