Aluminio hydro-formado, carbono de alto módulo, grafeno…  Los avances en los materiales son continuos y la industria de la bicicleta no es ajena a ello, nuevos compuestos y procesos de fabricación aparecen generando tendencias de mercado y haciendo que los usuarios queramos más, busquemos la máxima rigidez, la pérdida mínima de energía, lo último.

Pero esta misma industria no abandona o, incluso, rescata los nobles materiales que se usaban en el pasado, los cuales, tratados con profesionalidad, poco o nada tienen que envidiar a la última tecnología. Y, si un material destaca por encima del resto, ese es el acero.

La aparición en estos últimos meses de varias marcas que se animan a recuperar este material en sus cuadros, nos anima a hacer una pequeña selección de framesets dentro de la escena actual.

8Bar. Neukln V1

Hace escasas semanas, 8Bar nos presentaba su Neukln V1, un cuadro de acero cromo y molibdeno firmado por Reynolds, concretamente la tubería 520, caracterizada por su resistencia y capacidad de absorción. Este cuadro está destinado a quien busque líneas clásicas y cierta comodidad, debido a la capacidad de absorción de este compuesto. 8bar ha sabido ver que el mercado busca variedad, y entender que aquello del “todo vuelve” es totalmente vigente.

Dosnoventa. Stuttgart, Edinburgh y Barcelona

Los chicos de Barcelona ofrecen varios cuadros de acero en su catálogo, hace un tiempo os hablamos de los Stuttgart y Edinbourgh, dos “tope de gama” en piñón fijo y road, con un claro enfoque por la calidad y exclusividad. Pero la apuesta por este material viene de lejos, y es que haciendo honor a la ciudad que vio nacer a DSNV, desde 2013 disponen de un espectacular cuadro de tubería Columbus Spirit, inspirado en los usados en el campeonato de Keirin Japonés. Rigidez, unos tirantes traseros que garantizan reactividad y unos acabados en racores clásicos que hacen las delicias de cualquier amante de las bicicletas de pista clásicas. El “Handcrafted in Italy” estampado en todos sus cuadros, se hace muy patente en este Barcelona presente en los inicios del catálogo de Dosnoventa. Un trabajo al alcance de pocos en cuanto a calidad.

Destacar que Dosnoventa sigue apostando fuerte por su proyecto y este año estrena tubería propia con la que ya empieza a construir sus primeros modelos como, por ejemplo, el nuevo DSNV Houston.

Cinelli. Mash Work

Chas Christiansen participa en critériums, trabaja de mensajero, corre en ciclocross y no se corta en los diferentes alleycats en los que compite. La idea de una bicicleta diseñada para todo, por parte de Cinelli, no podía tener mejor aliado que Chas para ayudarles a desarrollarla. La ventaja de contar con Columbus, el productor de tubos de acero para bicicleta más conocido no dudó en ayudar a la marca italiana en la locura de fabricar una autentica bici “4all”.

Este frameset está fabricado en Columbus Cromor, lo que hace de la polivalencia su mejor virtud. Un eje pedalier elevado, unos tirantes traseros cortos y una capacidad de carga delantera notable, permite montar ruedas de hasta 35mm para usarla como CXSS con frenos y cableado interno, lo suficientemente ágil como para cabalgarla en un critérium, o montarle una parrilla delantera y hacer el reparto del día. Una auténtica todoterreno con un diseño atrevido, soldaduras vistas y un cuadro sin tratamiento lo cual dice todo del “gamberrismo” de este atractivo modelo.

P&B Greyhound

PoloAndBike ha sabido ver el tirón del acero y le ha querido dar una vuelta de tuerca más. Tras el modelo de acero CMNDR, que combina Cromoly con una horquilla de carbono. Próximamente verá la luz en una serie limitada el Greyhound.

Para la creación de un cuadro tan especial han confiado el trabajo a Arregui Velázquez, un doctor en Física-Química que, tras empezar de forma autodidacta y empaparse del conocimiento de expertos, se ha reinventado y afianzado como artesano en bicicletas a medida en el país.

Al acero le queda una larga vida y goza de buena salud. Este material, vuelve a ser del que están hecho los sueños sobre ruedas de cada vez más gente, que aprecia la calidad, el detalle y el mimo de algunas de estas creaciones. Sueños que en muchos casos tienen un nombre propio, Mattia… Y no, no hay connotaciones fuera de lo ciclístico, este es el nombre de un mago del soplete que ha conseguido que su marca Legor Cicli sea reconocida a nivel mundial y sus creaciones gozan de un prestigio fuera de toda duda. Representante de un oficio casi extinto, que ha vuelto a nacer en muy gran parte gracias al fenómeno del piñón fijo.

Quizá esa palabra peyorativa que utilizamos con las bicicletas viejas de acero, cuando las tildamos de “hierros”, mientras reposamos nuestro orgullo a lomos de una bicicleta de carbono último modelo… Está en peligro de extinción…

Y es que, “Steel is real”.